Got a flamin' heart can't get my fill | Layla's RS

Soul Sister, classmate.
A pesar de que a primera vista sean completamente diferentes, la pasión de ambas por la Literatura y el hecho de que, cada una a su modo, sea un bicho raro entre la marabunta de universitarios y ciudadanos de Holywell fue y es la clave de su curiosa amistad. Son conscientes de sus grandes diferencias, de que mientras una es rebeldía pura la otra es el colmo del pacifismo, pero el secreto está en que se comprenden y no pretenden cambiarse la una a la otra. Gaia es la que saca el lado más rebelde de Ziggy la que, en definitiva, a veces consigue sacarla de la utopía en la que vive y ponerle los pies en el suelo.

Gaia M. Holland

Flatmate, golden boy.

Hace ya dos años que comparten piso, y el francés se ha convertido en el chico de oro de Layla. Su amigo, confidente, protector, con quien sabe que puede compartir desde una cerveza a una tarde de estudio. El que la cuida y la hace reír con cualquier chorrada. El cascarrabias que siempre tiene mal humor mañanero y le estrella con sorna un cojín en la cara para evitar, sin éxito, que Ziggy invada su cama para repartir achuchones mañaneros. Tiene la paciencia de un santo, o de un hermano mayor, depende de por dónde se le mire... y desde hace poco, las cosas han cambiado entre ellos. Bastó que Gauvin regresara media hora antes de clase para encontrarse a la castaña en plena sesión de yoga nudista en el salón. Desde entonces, nada ha sido igual. Lay trata de restarle importancia, pero llega un momento en que no se puede negar lo evidente, la atracción que siente por él le puede por momentos y no sabe cómo manejar la situación. Tiene miedo a cagarla y cargarse su amistad, pero también teme arrepentirse de ser una cobarde.

GAUVIN S. BATHURST.

Yogi girl

Se conocieron hace poco, en una sesión de yoga en el parque tras la que comenzaron a charlar y conectaron de un modo increíble, pues parecen ser cada una la mitad de una misma persona. Resultó que Georgia era su nueva vecina y ella ni se había dado cuenta del detalle. Desde entonces, además del yoga comparten ratos de charla sobre los estudios de Layla, el trabajo de Georgia o simplemente quedan para cocinar alguna veggie pizza juntas. Ven películas, cotillean, se cuentan los típicos secretitos femeninos y poco a poco van forjando una bonita amistad, por mucho que Gauv a veces ponga mala cara cuando llega y se la encuentra sentada en su propio sofá.  

GEORGIA J. HATHAWAY

Fav barwoman.

Layla es una clienta más que habitual del Jenkin's, su pub de referencia en Holywell, y para su suerte, se lleva de fábula con la camarera. A base de ir allí día tras día a pedir sus raras infusiones y de charlar con cervezas de por medio se han ido haciendo amigas, gracias a que sus personalidades se amoldan perfectamente la una a la otra. Por mucho que Noelle sea responsable y delicada, mientras que Ziggy es un desastre con patas y con la cabeza en las nubes, eso no quita que cada vez que tienen ocasión se escapen a algún concierto de una de sus bandas favoritas.

NOELLE P. DUVEEN

Sheriff majete.

Que te detengan por estar borracha y medio drogada armando escándalo en plena calle no es nada gracioso, pero si tienes suerte y te toca un jefe de policía apenas dos años mayor que tú, hasta te lo puedes pasar bien en el calabozo. Eso fue lo que le ocurrió a Layla, y así conoció a Christer, aunque los detalles estén borrosos en su mente. Lo que sí recuerda es sentarse cual indio tras las rejas parloteando sin cesar de mil temas sin sentido mientras el la mira divertido, dándole coba para que suelte, si cabe, más burradas aún. Tuvo el detalle de acompañarla durante toda la noche y así no dejarla sola en su diminuta cárcel provisional,  y es algo que Ziggy agradece. Su opinión sobre la autoridad y las fuerzas del orden ha cambiado mucho desde que le conoce. No todos son unos cabrones autoritarios, al fin y al cabo.

CHRISTER G. LÜCKHAM

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NOMBRE DEL PERSONAJE